miércoles, enero 24, 2007

Buscando a Jesús en Casa ( B.J.C )



Hoy en día uno de los ataques mas fuertes es sobre la familia; el enemigo ha estado poniendo mucho énfasis en destruir a las familias, mientras que Dios quiere es que por familias, le adoremos y le exaltemos por su grandeza, por su magnificencia. El ser humano, usted, yo, fuimos creados para un solo motivo adorar a Dios y la pregunta es verdaderamente? le estamos adorando? estamos buscando de su presencia en nuestras familias? En mi casa buscamos de Jesús

El enemigo ataca a las familias, los hogares Por eso quisiera preguntarle algo VERDADERAMENTE ESTA DIOS EN SU CASA? O lo deja en la iglesia...

El crecimiento poblacional en el mundo entero constituye, hoy por hoy, un verdadero reto para los cristianos ya que se torna imperativo alcanzar al mayor número de personas con el evangelio transformador, sanador y salvador de Jesucristo. Nuestra ciudad crece con una rapidez sorprendente y urge que la iglesia llegue incluso a los rincones más apartados.

En aras de responder al compromiso que constituye compartir las Buenas Nuevas entre quienes no han tenido un encuentro personal con el Señor Jesús, se han establecido estrategias.
Una de ellas, es la que Dios le ha regalado a nuestros pastores una estrategia que no se rige a parámetros humanos sino que se basa en fundamentos bíblicos, son los nuevos llamados B.J.C (buscando a Jesús en casa). No es algo nuevo. Por el contrario, reunirse en casas es una práctica que se remonta a los primeros años del surgimiento del cristianismo.
Sobre esa base, iniciamos los B.J.C


¿Quiere asumir el reto de tener un B.J.C ?

Si te has sumado o estas interesado en sumarse a la tarea de proclamar el evangelio mediante los B.J.C ¡Fabuloso! Es una experiencia apasionante que te permitirá –de una manera sencilla y práctica—materializar la Gran Comisión. ¿La recuerda? Es la instrucción que hiciera el Señor Jesús a sus discípulos. Les dijo: “Por tanto, id, y haced discípulos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí, yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo. Amén”(Mateo 28:19,20).

¿Difícil? En lo más mínimo. Por el contrario, trabajar en la formación de un B.J.C es una labor sumamente sencilla. Podrás comprobarlo a medida que comprometes con el. Y usted puede. Tiene todas las capacidades que le otorgó nuestro amado Dios para lograrlo.